Sí,
creo que te quiero,
perdoname.
También perdónenme ustedes
por hacerles pasar por esto,
en serio.
Sé que te quiero
y también sé que tengo miedo.
Sí,
sé que soy malo en esto,
no,
no sé si soy un poeta.
También sé qué sentís,
por eso no quiero volver a decir tu nombre nunca más.
Pensar en vos me molesta
y ahora pienso mucho en vos;
por eso este remedo,
por eso dejo el moco en esta hoja y me voy a trabajar,
o leo el diario
o la música
o leo un libro,
pero este libro te gustó,
este libro te mostré y dijiste algo por él,
y fue un error fatal.
Ahora todo esto está invadido,
todo esto está desarmado,
desnudo,
vulnerado por tu algodón
y por la chocolatada y el malgasto,
todo siendo algo imposible,
y todo lo que siento ahora,
todo,
todo,
todo,
todo,
todo
me molesta.
Esos charcos, sí, peleo, sí,
peleo por decir algo que sea cierto.
Por ejemplo,
te puedo decir
que tus ojos
son dos armas de rayos que queman
o que son dos autos
y que son la noche,
o que vos sos la noche,
o que son dos bichos que me dan sinusitis
pero todo eso es demasiado cobarde.
Aun si pienso que sea cierto,
aunque te vea y en serio se haga de noche,
lo único que quiero decirte de verdad es que:
- te quiero
- soy un mentiroso, y
- que soy un cobarde
Quiero dejar de sentir que te quiero
porque es mentira,
vos lo sabés,
yo lo sé,
sabemos los dos
que el combustible del circo
es temer estar solo
y aunque pensara
que te hubiese querido
sin miedo
sabemos que no es cierto
¿pero disminuye algo miedo?
¿recorta algo?
Ahí estás vos,
otra vez,
invadiendo,
entrando insidiosa
por mi nariz y
por las orejas
y la boca
como el viento.
Si pudiera decirte que pares,
pero no puedo,
no puedo porque estás del otro lado,
fumando, o tomando algo
o hablando con alguien
pero tampoco puedo porque ahora
siento que yo soy vos
y que vos sos yo,
aunque no lo sepas ahora
o no lo sepas nunca,
aunque esto no valga nada nunca
aunque todo esto pase
y el mundo explote y nosotros explotemos con él
y nunca nadie nos recuerde jamás
ni dios
ni las cucarachas
ni los marcianos
ni los androides
ni los dinosaurios
ni los protozoos
igual intento,
intento porque tal vez,
si termino de escribir todo esto
pueda superar la contradicción,
y tal vez pueda dejar de sentir,
y estar tranquilo, por fin,
y así tal vez,
solo tal vez,
también pueda dejar de prostituirme.